Helicópteros sobrevolaban desde la mañana de este martes algunas comunidades de Tamazula, Durango, y minutos después comenzaron a escucharse disparos. Un fuerte enfrentamiento se presentó entre hombres armados y la Marina en la comunidad de El Limón, ubicada en la sierra de Tamazula, Durango.
Habitantes de las rancherías salieron de las viviendas por miedo a ser atacados, pero las mujeres y los niños se resguardaron en las casas.
La versión.
Ayer por la mañana —señaló la fuente— un helicóptero con militares disparó y lanzó granadas a las viviendas ubicadas en la comunidad de El Verano, ubicada a unos kilómetros de Guadalupe de los Reyes, perteneciente al municipio de Cosalá.
“Queremos irnos, pero los marinos no nos dejan salir de las casas”, expresa preocupada una de las madres de familia de El Verano. Aseguran que ya solicitaron apoyo a las autoridades de Cosalá, pero no han tenido respuesta.
Piden la atención de Derechos Humanos, pues aseguran que la zona es peligrosa para los menores.
Otras familias de las comunidades aledañas también se quedaron sin hombres y sin comunicación, pues estos salieron de las casas al escuchar las ráfagas desde los helicópteros.
Hasta el momento desconocen si hay personas sin vida, pero afirman que hoy arribaron mas helicópteros a la zona, pues se rumoraba que hombres armados habían derribado un helicóptero ayer por la mañana.
Ingreso de marinos.
Habitantes de Cosalá afirmaron haber visto pasar un helicóptero, una avioneta y un convoy de militares fuertemente armados hacia la sierra.
“Dicen que son marinos y buscan un helicóptero, pero no les importó tirar balazos a las casas sin saber quién estaba dentro de ellas, además de aventar granadas. Algunas personas huyeron del lugar como los hombres; las mujeres se refugiaron en una casa. Lo que los habitantes de ese lugar quieren es ayuda para poder salir del lugar junto con sus hijos.
Hicimos un llamado a más autoridades de Cosalá, pero no hay ayuda correspondiente. Hablé con un licenciado de Derechos Humanos, pero quería testimonio y no tenemos buena comunicación, ya que no hay energía eléctrica”, declaró una de las mujeres refugiada en El Verano.
Informan que ni durante la noche dejaron de disparar y sobrevolar helicópteros.
“Ayer eran dos avionetas y un helicóptero, pero ahora son como 10 los que se ven volando”, expresa otro de los habitantes de la zona. Por miedo a represalias negaron sus identidades.